Cata Bodegas Martínez Lacuesta

El jueves 25 de abril de 2024, recibimos la visita de Bodegas Martínez Lacuesta. El evento se celebró en el Hotel Center, Ronda Mijares, 86, a las 20:45 h.

El pasado jueves 25 de abril más de setenta asociados y amigos de la Asociación enológica de Castellón tuvimos el placer de contar con la presencia de Javier Bañales Vañes, director general en bodegas Martínez Lacuesta.

¡Qué afortunada y orgullosa debe sentirse la bodega con semejante comunicador! Desbordó pasión y saber a raudales.

Poco a poco, sin prisa, pero sin pausa, fue desgranando la historia de esta histórica bodega riojana desde sus orígenes, una bodega de las que vio nacer al “Rioja”, una bodega llena de corazón y tradición en su porfolio.

Bodegas Martínez Lacuesta se nos presentó como una bodega familiar y centenaria nacida en Haro, corazón de La Rioja. Una familia que ayudó a la creación de la actual D.O.Ca.Rioja, y que formó parte y motor de esta tierra de vinos.

Una de las pocas bodegas de La Rioja que puede presumir de haber elaborado vino en 3 siglos diferentes desde su nacimiento en 1895 hasta nuestros días y siempre bajo la propiedad de la familia.

Una bodega fiel representante de la tradición y evolución sin romper con el origen.

La forma en la que elaboran sus vinos defiende la vuelta a los orígenes a través de trabajo manual, dedicación y paciencia para ofrecer vinos finos con historia y de extrema calidad.

Se autodefinen como “afinadores de vinos”, por eso son también de los pocos autorizados a poner en sus etiquetas “vino fino”, adjetivo que inmediatamente se corrobora cuando los bebes y sientes su sedosidad. ¡No muchos vinos te regalan una sensación así al paladar!

El resultado habla por sí solo en cada sorbo. Vinos que logran poner de acuerdo a todo el que lo prueba.

Todos los vinos de sus marcas; Lacuesta, Martínez Lacuesta y Campeador, se elaboran con cepas autóctonas de tempranillo, garnacha, viura, graciano y mazuelo.

Iniciamos la cata con el vino “Martínez Lacuesta blanco viura 2022”

La clave de este blanco se basa en su crianza sobre lías repartida entre roble francés y americano y madera de acacia.

Presentó aromas sutiles de roble tostado sobre un fondo meloso de fruta fresca y notas de plátano maduro que le aporta la acacia.

Entrada fresca y ácida, con ligeras notas de la madera (caramelo).

Tras este vino de inicio, Javier nos propuso catar vinos emparejados, así que empezamos con “Lacuesta selecto crianza 2021 y Martínez Lacuesta 2019”

El primero se mostró afrutado, jugoso y fresco; un vino joven, elaborado a partir de las variedades Graciano, Mazuelo y Tempranillo.

El segundo vino repleto de aromas de frutas rojas maduras (frambuesas, cerezas, fresas silvestres, grosellas…) sobre un fondo especiado de vainilla y caramelo tostado junto a un sutil recuerdo a galletas, café y menta.

En boca, su buena acidez, le aportó aporta frescura y equilibrio, mientras que sus taninos suaves nos mostraron un vino tinto de cuerpo medio y sabor persistente.

La siguiente pareja estuvo formada por “Hinia 2012 y Martínez Lacuesta reserva 2011”

Ambos vinos son grandes clásicos de Martínez Lacuesta. Se elaboran mayoritariamente con tempranillo acompañado de graciano y mazuelo. El primero de ellos destacó por sus notas de frutos negros maduros que nos llevaron a una elegante gama de notas balsámicas, hojas de tabaco, caramelo, vainilla y chocolate y su sedosidad en boca resultado de los 36 meses de crianza en barrica de roble americano. Vino de acidez equilibrada muy elegante

Destaca por su intensidad aromática, con Boca

El segundo, también, siguiendo la línea clásica de Rioja, se mostró equilibrado, sedoso y elegante destacando por su amplio abanico de aromas y sabores que iban desde la fruta roja madura hasta las notas tostadas de crianza, con pinceladas minerales y ligeros balsámicos.

Cambiando de estilo bordelés a borgoñón, Javier nos presentó la línea “Campeador” Esta referencia comenzó a elaborarse en 1916, inspirada en el estilo de los borgoñas de la época. Una combinación a partes iguales de Tempranillo y Garnacha que cuenta con una larga crianza tanto en roble americano como en botella.

“Campeador 2015 y Campeador gran reserva 2012”

Campeador 2015 presentó una nariz llena de aromas especiados: pimienta negra, regaliz dulce, nuez moscada, café, vainilla y

canela junto a notas de fruta madura especiada. En ataque se mostró redondo, con buena presencia, sabroso y de textura aterciopelada

“Campeador 2012” Intenso, con notas a fruta madura, especias, regaliz dulce, nuez moscada, café, vainilla y canela.

Muy expresivo y complejo, lleno de sabores y una agradable acidez.

Acabamos la cata-presentación con el vermouth reserva Martínez Lacuesta elaborado con un vino blanco base de la variedad airén aromatizado mezclado con «la conzia», un extracto de 24 hierbas aromáticas en la que destaca el ajenjo; al que se añade el caramelo (azúcar quemado) que le da su característico color ambarino. Todo ello envejecido en barricas de roble americano durante 2 a 3 años.

Una vez acabado este proceso artesanal, en Martínez Lacuesta le dan una crianza adicional de 7 meses en roble francés Allier y esta es su gran diferencia. El resultado es una mayor complejidad aromática, una sensación de dulzor más perceptible, pero también un amargor amable con toques torrefactos procedentes del tostado de la madera.

Gran velada que se podría resumir en tres líneas

Lacuesta es frescor, desenfado y cercanía.

Martínez Lacuesta es historia adaptada a las nuevas tendencias.

Campeador representa sus vinos más clásicos, de gran calidad y eternos.

Agradecer a la bodega la oportunidad brindada a la asociación por darnos a conocer su trabajo, y a todos aquellos que han hecho posible la misma, en especial a Paco González Yuste por haberla hecho realidad.

Texto.- Paco Prades

Fotografías.- Avel•lí Gómez, Beatriz Comisqueros y María José Alcácer

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